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Niños, ¡a comer… jamón ibérico!

Ya os hemos comentado en más de una ocasión los beneficios saludables que aporta el jamón ibérico a nuestro organismo y cómo la ingesta de este alimento en los más pequeños, no debe preocuparnos. Lo cierto es que el jamón ibérico es bueno para todos siempre que se consuma con moderación y pongamos especial atención en la sal que lo compone y en los posibles atragantamientos en los niños. Por ello, es recomendable que, siempre que se vaya a comer el jamón directamente en lonchas o en bocadillo, se corte bien en trocitos pequeños y así los peques podrán disfrutarlo tanto como los mayores.

 

Lo que sea, pero con jamón ibérico

Hoy vamos a dar un pasito más allá y vamos a enseñaros otras formas diferentes, y más divertidas, con las que ofrecerles a los niños la posibilidad de disfrutar del jamón ibérico y que no sea tan habitual. Os enseñamos algunos platos que encantan a los niños y en los que el jamón ibérico puede ser el protagonista.

  • Elaborar los paninis es muy sencillo y a los niños les encanta. Además, este plato puede servirles como alimento en cualquier momento del día, incluso para almorzar o merendar. Es tan fácil como partir una barra de pan por la mitad y añadirle ingredientes. Os recomendamos poner una capa de jamón ibérico a trocitos pequeños en la base, seguida de otra de queso en lonchas y encima, un poco de orégano. Metedla en el horno y esperad unos breves minutos. ¡Exquisito!
  • San Jacobo de jamón ibérico. ¡Y lo bien que se comen los niños el San Jacobo! Da gusto ver cómo hay platos con los que se portan como auténticos campeones. Y si, encima, les aportamos un plus a esas recetas que tanto les encanta, ya los tenemos conquistados todo el día. Comprad en el supermercado San Jacobo con jamón ibérico y queso o elaboradlos de manera casera y ya veréis cómo vuestros hijos no se levantan de la mesa hasta habérselo comido todo.

 

Queso fundido: el mejor compañero del jamón ibérico

Niños y jamón ibéricoEl jamón es perfecto en cualquier receta, pero si encima lo acompañamos de delicioso queso fundido, ya encontramos el éxtasis de los sabores. Estos son algunos ejemplos de cómo podemos sacarle partido a estos dos alimentos:

 

  • Pizza de jamón ibérico. No os contamos nada nuevo si decimos que a los más peques les apasiona la pizza. Siempre esperan a que haya un día especial en que se cene este alimento tan atractivo. Pues bien, ese momento es una buena oportunidad para recurrir al jamón ibérico como ingrediente estrella. Utilizarlo en taquitos será lo ideal. Además, os aconsejamos añadirle huevo en el centro y extra de queso para que se funda bien. ¡Una auténtica delicia!
  • Crepes de jamón ibérico y queso. Es decir la palabra crepe y, como por arte de magia, aparecen niños revoloteando a nuestro alrededor. Les encanta esta receta y, aunque siempre la asocian al dulce, nunca está de más ofrecerles una alternativa salada con la que disfrutarán. Además, el queso fundido escapando de la masa de la crepe será algo que les fascine. Sin duda, es una receta fácil de comer y de elaborar.

Como veis, el jamón ibérico no entiende de edades. Pero para poder disfrutar de su sabor de la manera que nos merecemos, debemos recurrir al mejor. Por ello, os invitamos a visitar Tu Jamón Directo para que podáis comprar jamón ibérico desde casa. Además, allí encontraréis muchas más recetas para deleitaros con los mejores platos hechos con este ingrediente típico español. Ya no os hará falta llamar a los niños a comer. Con estas recetas, no se querrán levantar de la mesa.

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